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1 de abril de 2009

Isabel no estaba muy satisfecha con su vida, su marido no le daba muy buena vida. El la engañaba continuamente con otras mujeres. Ella se daba cuenta cuando él se traía algún lío de faldas. En muchas ocasiones Isabel le hacía ver que no se enteraba. Isabel esperó y aguantó a que su hija fuese mayor de edad. Ella que trabajaba de dependienta en unos almacenes, al llegar una tarde a su casa, su marido estaba en el baño. Ella aprovechó para mirarle el móvil y, efectivamente, ahí tenía su prueba. Tenía dos mensajes de su amante, donde le decía para quedar esa misma noche. Isabel dejó el móvil con mucho cuidado. Se hizo la loca cuando su marido le dijo que tenía que salir, que le habían llamado de la fábrica, que había una urgencia de una maquina estropeada. Ella no le dijo nada pero cuando él se fue salio detrás de él. Y así los pilló “infraganti”. Se acercó con mucha frialdad y sólo le dijo: “no vuelvas a poner los pies en mi casa”. Así terminó su relación de bastantes años de infidelidades por parte de él. Isabel se arropó entonces en la familia en sus padres y en su hermana Maria, que la ayudaron a salir de esa situación de abandono y material, ya que ella solo tenía su pequeño sueldo de dependienta. Pablo también la acogió muy bien. Isabel sólo les decía que estaba arrepentida de todos los años que no había estado con ellos, sobretodo en momentos delicados que tuvieron. Isabel y Maria tenían la sensación que empezaba de nuevo, ya que prácticamente no se conocían mucho. Isabel aprovechó la situación, ya que le gustaba ir un poco de victima. Eso le daba resultado a la hora de sacar cualquier cosa que necesitaba en ese momento. ¿Isabel estaba actuando de corazón? o sólo ¿fue puro interés lo que le hizo que se acercara
a su familia? ¿Las personas cambiamos?... continuará.....

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