Aquel que busca el amor es alegre, el anhelo le guia. Aquel que ama es dichoso, el amor le enciende por completo.
La melancolía, es un sentimiento que se ramifica en el amor frustrado, por esas cosas que tiene la vida... Solo son melancólicos los que amaron ya, los que llevan en el corazón heridas que no cierran. ¿ Sera que el amor nos deja así cuando parte sin regreso?. Después de un amor no recíproco, nos convertimos en convalecientes de esta emoción inevitable, una lesión se apodera de nosotros, haciendo mucho daño y confundiéndonos... Creemos que es así... y sin mas... Andamos, aunque ya no con el ciento por ciento. Sentimos, que hemos de haber perdido algo que no tiene modo de ser recuperado... Y es así... Las heridas del amor no son fáciles de curar, no cicatrizan rápidamente, nos producen un divague crónico y permanente, cuyo dolor invade almas y las conquista para hacerlas sufrir... Eso no es amor, es su trasmutación y con ella, su propio resultado.
Sabiendo que no hay un antídoto eficaz para la melancolía, a cambio les traigo aquí, al Recuerdo... Sí, pero no el recuerdo que la genera, sino el otro... El que nos lleva al lugar, donde nuestra memoria, hace contacto con los momentos pasados de dicha y felicidad. El recuerdo de esos instantes vividos, llenos de alegrías, son el mejor analgésico para el dolor del corazón roto... Acordarnos, solo de lo bueno vivido, todo el tiempo que nuestra razón quiera estar ahí ... Una suma seria muy practica en ese momento también... Sí... Sumemosle el amor que sentimos, para quien verdaderamente esta con nosotros... Los que nos rodean... Ellos, son una realidad en nuestras vidas... La melancolía, poco a poco empezara a sentirse acorralada, e ira retrocediendo. La realidad tangible, manifestada desde nuestro razonamiento, de que todavía hay tanto y tantos para amar, sera apabullante... entonces el dolor ira poco a poco despareciendo, gracias al amor que depositaremos en nuestro presente...
La melancolía, es un sentimiento que empieza en el ya no esta... Y termina en el ya no existe...
La vida es la contemplación de nuestros actos y emociones... Demosle entonces un buen tratamiento... Amemos en presente... Amemos hoy... Amemos lo que tengamos de cierto, que amar lo que esta aquí...Ahora... es la única verdad y es el sentimiento que mas merece ser tenido en cuenta...
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